Estambul, Turquía.- El V Foro Mundial del Agua de Estambul terminó este domingo con una declaración que no apoya, tal como reclamaban algunos países latinoamericanos, que el acceso al agua potable sea elevado a derecho humano, por lo que 20 países firmaron una declaración disidente.
Esos países trataron en vano de que el documento reconociese el acceso a agua potable y el saneamiento como un "derecho humano básico", más que una "necesidad humana básica", una modificación con implicaciones legales y políticas.
Finalmente, 20 países firmaron una declaración disidente para dejar clara su posición al cierre de la conferencia. Los países iberoamericanos que la suscribieron son: Bolivia, Chile, Cuba, Ecuador, España, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay, Uruguay y Venezuela.
La declaración alternativa reconoce "el acceso al agua y al saneamiento como un derecho humano y se compromete a tomar las acciones necesarias para la progresiva puesta en práctica de este derecho".
"Había un fuerte consenso en que el derecho al agua no estaba considerado adecuadamente en el proyecto de declaración ministerial", justificó un delegado uruguayo.
En el comunicado final no disidente más de 100 países se comprometieron a proporcionar agua potable y saneamientos a miles de millones de personas y a levantar defensas contra las inundaciones y la sequía.
La declaración coincide con el Día Mundial del Agua y pone punto final a la mayor cita celebrada nunca sobre este tema.
"El mundo hace frente a cambios rápidos y sin precedentes, incluyendo el crecimiento de la población, los flujos migratorios, la urbanización, el cambio climático, la desertización, la sequía, el uso y degradación de la tierra, y los cambios económicos y en la dieta", afirma la declaración final, que no tiene carácter vinculante.
El texto recomienda una serie de acciones, como estrechar la cooperación para solucionar las disputas sobre el agua, medidas para paliar las inundaciones y las sequías, mejorar la gestión de los recursos hidrológicos y reducir la contaminación de ríos, lagos y acuíferos.
Para el ministro turco de Medio Ambiente, Veysel Eroglu, "la declaración ministerial es un documento importante que servirá de referencia a nivel gubernamental".
El Foro Mundial del Agua se celebra cada tres años y ha cobrado mayor importancia como ámbito para debatir los cada vez mayores problemas relacionados con el agua.
Al menos 25.000 representantes oficiales, especialistas y activistas participaron en la edición de este año, un récord de asistencia.
Los defensores de las zonas rurales pobres, del medio ambiente y los representantes sindicales criticaron el foro como un promotor de la privatización del agua y reclamaron que sea organizado por la ONU, una demanda que apoyaron países como Bolivia, Chile o Venezuela.
"Pedimos que la asignación de agua se decida en un foro abierto, transparente y democrático más que en una feria comercial para las mayores empresas del mundo", dijo Maude Barlow, alto asesor del presidente de la Asamblea General de la ONU.
El Foro Mundial del Agua lo organiza el Consejo Mundial del Agua, una organización con sede en Francia cuya financiación procede principalmente de la industria del agua. Antes de Estambul, se celebró en Marrakech, La Haya, Kyoto y México .
La cita busca oficialmente dar buscar respuestas a la actual crisis del preciado recurso, provocada ante todo por el vertiginoso aumento de su demanda.
De los 6 mil 500 millones de personas en todo el planeta actualmente, la población mundial debería sobrepasar los 9.000 millones en 2050. Y a ese ritmo, la demanda de agua aumentaría también a 64.000 millones de m3 al año, según la ONU.
Esta situación agudizará la competencia entre los diferentes usos del agua, con la agricultura netamente en cabeza (70%), seguida por la industria (20%) y las necesidades domésticas (10%).
Material extraído: http://www.oem.com.mx/oem/notas/n1093866.htm